La Justicia absolvió a cuatro policías que habían sido procesados en mayo de 2010 tras ser acusados de apropiarse de $ 30.000 producto de un robo. Ahora los agentes preparan una demanda civil contra el Estado que rondará US$ 1.000.000
El hecho ocurrió el 21 de mayo de 2010, cuando los cuatro policías (tres hombres y una mujer) se dirigían a realizar un allanamiento coordinado por el Departamento de Orden Público de la Jefatura de Policía de Montevideo, donde en ese momento prestaban servicio.
En el trayecto, en la zona del Paso Molino, presenciaron un arrebato cometido por dos hombres que circulaban en una moto y que, tras romper el vidrio de un automóvil que se encontraba parado en un semáforo, robaron la cartera de la conductora, que se encontraba sobre uno de los asientos.
Los policías iniciaron la persecución de los hombres, a quienes finalmente detuvieron, logrando de esa forma recuperar la cartera robada. Los agentes condujeron a los delincuentes ante la jueza penal Fanny Canessa, quien terminó procesándolos con prisión.
Pero la mujer que había sufrido robo denunció que en la cartera llevaba $ 30.000 que horas antes había retirado de una sucursal bancaria. Como el dinero no apareció, la jueza concluyó que había quedado en manos de los cuatro policías, y por eso los procesó con prisión por el delito de "peculado".
Luego, la jueza Canessa, por tratarse de funcionarios policiales, declinó competencia y derivó el caso a su colega Graciela Gatti, titular de uno de los juzgados especializados en crimen organizado.
Gatti, a pedido del fiscal Ricardo Perciballe, sobreseyó el martes 14 a los cuatro policías procesados por no existir "plena prueba que permitiera establecer que el dinero ($ 30.000) se encontraba a su custodia y menos aun que se apropiaran del mismo", según la resolución a la que accedió El País.
El abogado Diego Durand, defensor de los cuatro policías, indicó que sus clientes, tras ser procesados, estuvieron cuatro meses en prisión, ya que recién en septiembre de 2010 lograron la excarcelación.
Agregó que si bien la grabación de seguridad del banco demuestra que la mujer retiró el dinero, luego "no se probó que estuviera dentro de la cartera al momento de la actuación de los cuatro policías".
Para el abogado, los procesamientos de sus clientes fueron ordenados de forma "apresurada" porque, a su criterio, "lo que hubiera correspondido es que cuando terminara el plazo legal de 48 horas para tenerlos detenidos se estableciera un presumario para continuar con la investigación".
Durand dijo a El País que la mujer que fue víctima del robo declaró ante la jueza Gatti y el fiscal Perciballe, y si bien en su testimonio "incurrió en varias contradicciones", finalmente el expediente también se archivó en relación con ella.
DEMANDA. Durand indicó que ya está trabajando en la elaboración de una demanda civil contra el Poder Judicial en la que reclamará un resarcimiento por los perjuicios que padecieron sus clientes tras ser procesados y los cuatro meses que estuvieron en prisión.
El abogado, que está reuniendo documentos y pruebas para estimar el daño padecido por cada policía y así ultimar los detalles de la demanda, estimó que la acción podría ascender a US$ 1.000.000, a razón de US$ 250.000 por cada uno.
Durand dijo que, entre otras cosas, pedirá un resarcimiento ya que uno de los efectivos fue padre mientras estaba en prisión, el padre de la mujer policía falleció mientras ella estaba recluida, y otro de los efectivos perdió la posibilidad de realizar trabajos en el exterior para un organismo internacional.
El abogado resaltó que la investigación interna policial estableció -incluso antes de la absolución judicial de sus clientes- que los policías "no tuvieron responsabilidad alguna en el hecho".
Por ese motivo, los cuatro policías están en condiciones de retomar sus labores en el Departamento de Orden Público de la Jefatura de Policía de Montevideo "a la brevedad", subrayó Durand.
Según el abogado, inicialmente sus clientes estaban muy afectados por la situación que vivieron, pero ahora "todos quieren volver a su trabajo habitual como policías".
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