Un policía fue herido de gravedad en una rapiña, en la que también resultó baleado un comerciante que está fuera de peligro. Según dijo la hijastra del efectivo a El País, la situación "es complicada".
Sobre las cuatro y media de la mañana, un empresario que circulaba en su automóvil por la avenida General Flores, al llegar al semáforo en la esquina con Chimborazo fue sorprendido por dos sujetos que lo obligaron a bajar del vehículo, mediante amenazas con armas de fuego.
Impaciente porque no bajaba inmediatamente, uno de los delincuentes efectuó dos disparos. Uno de ellos hirió en la pierna al comerciante, quien logró bajarse del automóvil a pesar de estar herido, y pidiendo ayuda se arrastró unos metros por el cantero de la avenida General Flores.
Mientras los dos sujetos se subían al automóvil y maniobraban para fugar del lugar del crimen, un policía bajó del ómnibus en que viajaba y comenzó allí un intercambio de disparos que culminó con el efectivo herido de bala.
El uniformado fue identificado como Juan Fernández y fue trasladado de urgencia al Hospital Policial donde fue ingresado directamente a block quirúrgico.
El comerciante herido, identificado como Carmelo Bagnulo, de 54 años de edad, fue derivado a un centro asistencial.
Según fuentes vinculadas a la investigación de este caso, Bagnulo está fuera de peligro y podría ser dado de alta en las próximas horas.
FAMILIA. Natalia Quintana, hijastra del efectivo herido, dijo a El País que la situación de Fernández "es complicada", pero se aguarda por su evolución.
Quintana manifestó que su padrastro ingresó al hospital, próximo a las cinco y media de la madrugada e inmediatamente fue derivado a block quirúrgico, donde se le realizó una compleja operación, que terminó sobre la una de la tarde.
El agente está internado en el CTI, en coma farmacológico e intubado.
Según Quintana, recibió el balazo de espaldas, le fracturó la cadera y el proyectil salió por el abdomen. Además, informó que tiene un balazo en el pie, pero la herida es "superficial y no reviste gravedad".
"En estos casos tenés que ser fuerte y donde sientas que flaqueás tenes que sacar fuerzas de donde sea", contó Quintana sobre la situación que vive la familia a raíz de este hecho.
Fernández trabaja en la cárcel de Canelones, y es encargado de los viveres, además de hacer un servicio 222 en una comisaría capitalina.
Rapiña y agresión
Un hombre mayor de edad fue asaltado ayer a la tarde en la esquina de Yi y Mercedes. Tras el asalto el delincuente le pegó un culatazo en la cabeza, dejándolo tirado en la vereda. y huyendo del lugar. Una emergencia médico móvil asistió al hombre quien presentó traumatismo de cráneo y herida cortante en cuero cabelludo.
Fuente: El País Digital
